Identificar las necesidades del negocio
En el artículo anterior hablábamos de una aproximación cíclica a la gestión del valor. Ese modelo puede sonar razonable, pero también es bastante abstracto: hace falta algo más para llevar a cabo su propósito. El complemento necesario es la escala (“Success Ladder”) que incorpora los pasos, y sus elementos constituyentes, para ir desde la necesidad de negocio hasta el resultado esperado, que refleja el éxito de este proceso.
La escala incorpora un número variable de pasos y componentes.
El comienzo es siempre la necesidad de negocio que se ha identificado.
El paso final culmina en el resultado esperado, seleccionado entre múltiples posibilidades. Por término general, cada problema, cada necesidad, puede abordarse de muchas formas, pero una forma efectiva de empezar a acercarse a la solución es imaginar a qué se parece la consecución del fin buscado.
En medio, una serie de pasos intermedios pensados para determinar: el descubrimiento de la necesidad y su audiencia; las etapas que facilitan la entrega de la solución; y el reconocimiento de que se ha alcanzado el resultado esperado. Lo que se puede ver desde otra óptica como la hipótesis de valor, los medios para validarla, y las evidencias que la confirman.
Identificar las barreras
Cada uno de los pasos tiene unos resultados que enlazan con el siguiente en la escala. Esos pasos progresivos que se van acercando al resultado buscado, ayudan a identificar las barreras para conseguir los resultados intermedios. Las barreras de cada paso se solucionan con una serie de capacidades que pueden abordarse de varias formas. Así que avanzar paso a paso, ayuda a concretar las necesidades que definen el proceso final (proyecto, actividad, iniciativa) necesario para alcanzar el resultado final buscado.
El aspecto general del modelo se parece a:
El arranque (problema o necesidad) y el final (a qué se parece el resultado esperado) pueden ser fáciles de imaginar y gestionar. En cambio, merece la pena hablar con un poco más detalle de los pasos intermedios.
Romper con los bloqueos
Por ejemplo, cada paso tiene un resultado. Ese resultado es lo que obtenemos tras romper algún tipo de bloqueo. Es decir, si la actividad puede progresar hacia el final buscado más lentamente, o con rodeos, no consideramos que estamos ante uno de los pasos. Pero si estamos ante una barrera o bloqueo que hay que superar realizando acciones, lo que se genere sí que se considera un resultado. El porqué de adoptar esta perspectiva es que, de esta manera, los resultados requieren acciones, inversión, esfuerzo, … para eliminar esas barreras. Acciones que implican alternativas (llamadas Solution Option) que deben ser analizadas, evaluadas y abordadas.
Buscar soluciones a un problema
En este modelo, al hablar de Solution Options, se reconoce que no hay una única solución para cada problema (una única solución implica planificación detallada de antemano y eliminar posibilidades). En lugar de ello la aproximación elegida por este modelo es la de acercarse progresivamente y basándose en evidencias al resultado esperado.
Eso hace que los pasos intermedios dibujen el camino hacia el estado final usando la Solution Option como vehículo. Los pasos intermedios se estructuran en tres bloques: el descubrimiento de la necesidad de una solución; la creación, entrega y despliegue; y el reconocimiento del valor entregado por la solución, paso necesario para considerarla un éxito.
Cada uno de esos pasos tienen tanto una hipótesis de valor entregado, como una validación de ese valor. Es decir, todos los avances se sustentan en la identificación y entrega de valor, y se articulan con una solución variable cuyo fin se conoce, pero cuyo camino se descubre.
Medir los resultados con KPIs
La forma de definir la validación de las hipótesis planteadas es por medio de indicadores (KPIs) en cada etapa. La identificación de los distintos KPIs, su validación, implementación y el valor que entregan es uno de los elementos básicos sobre los que se apoya todo el modelo. La adecuada elección de indicadores permite entender en qué consiste el valor buscado, cómo identificarlo y obviamente conocer si se ha alcanzado, validando las hipótesis de valor planteadas.
Anticipar los problemas y explicitar cómo lo hacemos
Este es seguramente uno de los principales atractivos de este modelo de trabajo. Basado en soluciones de sentido común como anticipar (definiendo el “qué” del resultado buscado, y no el “cómo”) y explicitar (enumerando las etapas que llevan a él), añade otra dimensión básica como es el empirismo y la evidencia. Es decir, anticipar el valor esperado asociado a cada etapa y al objetivo final, y con él, la forma de determinar si se ha alcanzado, evaluando a cada paso que el camino es el adecuado.
Curiosamente, aunque suene a marco ágil, este ciclo y modelo nacen del mundo del Business Analysis: el sentido común están todas partes, aunque se aplique a cuentagotas en sitios donde debería ser la norma.
Consejos para aplicar el Success Ladder
Estos dos artículos sólo quieren ser una pequeña pincelada introductoria a este modelo de trabajo que ayuda a las organizaciones a estructurar sus ideas, y plasmarlas en busca del valor. Obviamente hay muchos más matices, elementos, técnicas y herramientas para conseguir sus fines.
Para terminar, unas reflexiones nacidas de este modelo:
- Hay que dejar de lado los pequeños problemas o más bien seleccionar -priorizar- los que se abordan en función del impacto.
- Hay que hacer lo posible por validar el resultado de negocio buscado antes de diseñar una solución.
- Hay que identificar los objetivos de la solución a partir de los objetivos de negocio. E impulsar los resultados que ayuden en mayor medida.
- Los proyectos deben aportar valor (obvio pero ¿se hace siempre?). Planifica proyectos mínimos para el máximo valor. Eliminar estorbos, ruido, “pelusas”.
- Medir el progreso y analizar los datos y preguntarse continuamente si vamos en la dirección adecuada, incluso si merece la pena hacer ese camino.
- Crear estrategias de mejora basadas en los gaps identificados (y medidos).
Next Steps, ¿cómo puedo formarme en Análisis de Negocio?
Esta técnica está descrita con mayor detalle y sustentada por ejercicios y actividades que ayudan a experimentarla e interiorizar sus conceptos en varios cursos de Netmind, por ejemplo en Establishing business value and KPIs (JIS 457) donde se sigue el ciclo completo y se trabaja la definición de los indicadores y métricas adecuados para validar la generación de una solución de empresa.